Los cereales constituyen la fuente de nutrientes más importante de la humanidad por sus características nutritivas, su costo moderado y su capacidad de proporcionarte energía. Se relacionan con el origen de la civilización y la cultura de todos los pueblos. El hombre se hizo sedentario cuando aprendió a cultivar los cereales y aprovecharlos como parte de su alimentación.

Los habitantes de cada zona geográfica del planeta consumen un cereal en específico, base de su cultura culinaria. El arroz es la base de la comida de los pueblos asiáticos; entre los europeos predomina el trigo; para los americanos, está el maíz; el sorgo y el mijo son propios de las comunidades africanas. A los cereales como la avena los usa tu mamá para hacerte un rico atole, y el centeno se utiliza para hacer pan para quienes quieren mejorar su digestión, o ¡imagínate! el granito de cebada es el más importante para fabricar la cerveza.

En nuestro laboratorio hemos mezclado harinas de algunos de estos cereales con nopal, frijol, soya, haba y garbanzo y  hemos elaborado pan, tortillas, galletas y botanas.