Nuestra portada
Portada febrero de 2006

Por: Antonio Vidal
1. Onda P. Toma entre tus manos el gusano con los anillos cerrados. Estíralo un poco y suelta despacio, uno por uno, los anillos que tienes en la mano derecha, ¿ves? Así se mueven las ondas P, empujan y jalan hacia los lados el suelo por el que pasan.
2. Onda S. Junta un poco los anillos del gusano y sostenlo entre tus manos. Ahora, separa tus manos y voltea tus palmas hacia abajo, ¡mira! El gusano bota hacia arriba y hacia abajo. Así viajan las ondas S, moviendo hacia arriba y hacia abajo el suelo.

3. Onda L. Coloca el gusano en el suelo y estíralo. Ahora, sostenlo por un extremo y muévelo hacia los lados. El espiral se tuerce por el suelo, hasta detenerse. ¿Recuerdas la fotografía de la vía del tren?

Cuando tiembla, las ondas P y S producen un movimiento trepidatorio, el cual se siente cerca del epicentro, y en lugares lejanos a éste, se percibe el movimiento de las ondas L, que es oscilatorio.